TENGO COVID: ¿QUÉ PUEDO COMER?

TENGO COVID: ¿QUÉ PUEDO COMER?

En este artículo te cuento mi experiencia sanando el Covid y recomendaciones alimenticias que pueden ayudar a potenciar tu inmunidad y reducir la severidad de la infección.
Una malnutrición impacta en tu sistema inmune de muchas formas.
Varios nutrientes estudiados ejercen acción inmunomoduladora con el potencial de alterar la susceptibilidad a la enfermedad que provocan virus como el Coronavirus, así como la progresión de los síntomas y la probabilidad de enfermar gravemente.

Recuerda siempre buscar atención médica especializada en caso que tus síntomas sean severos y de larga duración.

Hace algunos días comencé a presentar síntomas extraños. Al principio imaginé que estaba un poco insolada y deshidratada por una salida del día anterior (y quizás sí lo estaba), pero con los días me di cuenta que era un cuadro más grande y estable.


El primer día me dio fiebre, mareos muy molestos y vómitos. Mi cuerpo no aceptaba comer absolutamente nada, incluso me costó beber agua las primeras 24 horas y eso me llevó a una deshidratación mayor. Sabía que hidratarme era fundamental, así que pedí ayuda y consejos a amigas médicas y enfermeras, y llegué a la fórmula isotónica casera más simple que finalmente logré beber:


Agua + azúcar + jugo de limón + sal


Fue mi bebida salvadora y estoy tremendamente agradecida de ella. Me estabilizó y me permitió comenzar a hidratarme. Beber abundante agua purificada es clave al momento de presentar síntomas covid. Pero si ya estás en estado de deshidratación, necesitas agregarle electrolitos a esa agua: para eso, la sal.

La receta es:
-2 tazas de agua hervida caliente
-Jugo de 1 limón
-1 cdta. colmada de azúcar (o algún sirope)
-¼ cdta. de sal

El jugo de limón te aporta vitamina C, que ayuda a desinflamar el organismo, y es ideal cuando no tienes apetito para comer alimentos sólidos. Y el azúcar es glucosa, que le dará energía a tus células.

Además de la isotónica, bebí agua con hierbas antiinflamatorias: romero, manzanilla y menta.
Y mucho limón! Agua con limón.


Los primeros 3 días casi no comí, realmente no podía. Si te pasa lo mismo, recuerda agregar sal en algunas de tus bebidas, ya que los minerales presentes evitarán que te deshidrates.

Cuando pude comer algo sólido, comencé con SANDÍA. Que es principalmente agua, glucosa, vitaminas y minerales. Trozos pequeños, en la medida que mi organismo lo permitía.


Al estar conectad@s con nuestras sensaciones físicas, podemos oír a nuestro cuerpo y descubrir con mayor precisión lo que necesita. Por eso los primeros días ayuné bebiendo mucha agua y comí frutas como sandía y durazno. Luego empecé a probar vegetales como pepino, zanahoria y tomates.


Recién al cuarto día pude incorporar alimentos más calóricos y protéicos, como tofu o legumbres. La proteína en un proceso infeccioso también es indispensable, ya que es la base estructural de tus células inmunitarias. Lo ideal es que siempre consumamos suficiente proteína, grasas buenas y micronutrientes, así si sufrimos alguna infección y el apetito desaparece, el cuerpo cuente con reservas por algunos días.

Cuando vuelvas a recuperar el apetito, comienza gradualmente a comer porciones un poco más grandes, y mayor variedad de alimentos. Tu Microbiota intestinal también se vuelve más sensible luego del Covid. Algunas personas presentan inflamación intestinal cuando vuelven a comer comida “normal”, así que trata de mantener tus comidas simples, naturales y modulando la cantidad.


3 alimentos-medicina que he incluído bastante, con propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y protectores de los pulmones son:


Cebolla
Ajo
Jengibre


El jengibre lo rallo y lo infusiono en agua caliente.

La cebolla y el ajo los corto, al igual que el brócoli, y los dejo reposar unos 20 minutos, para permitir la aparición de aliina y sulforafano (compuestos antioxidantes protectores).

Luego los cocino, generalmente con tomate. Un poco de sal, cúrcuma, pimienta y alguna fuente de proteína vegetal. Estos guisos o currys son muy simples y rápidos de preparar. Y son tremendamente nutritivos.


Cuando mi apetito aumentó, fui agregando porciones mayores de comida, aumentando la variedad también.


Hierbas como albahaca y cebollín, y las hierbas aromáticas que sueles comer, son fuente de numerosos fitoquímicos y ofrecen acción antiinflamatoria, así que inclúyelas, junto a hojas verdes y el arcoíris de vegetales más diverso que consigas.


Grasas saludables comencé unos días después a comer, en pequeñas cantidades, como la palta, almendras y semillas. El omega 3 no puede faltar: es uno de los nutrientes moduladores del sistema inmunitario. Nueces, chía, linaza y semillas de cáñamo son opciones vegetales de este nutriente.
Estoy consumiendo además un suplemento de Omega 3 vegano hace un par de meses.

Las especias y hierbas en general tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Si puedes agregar algunas de ellas a tus comidas o bebidas todos los días, estarás apoyando tu sistema inmune que estará combatiendo el virus y sus efectos.


-Cúrcuma + pimienta + grasa saludable (ej: leche de coco o nueces)
-Jengibre
-Tomillo
-Orégano
-Clavo de olor
-Canela
-Salvia
-Menta
-Romero
-Manzanilla
-Albahaca
(entre otros)

Cada persona reacciona diferente a una infección de Covid, por lo tanto no hay un protocolo único y estándar para tod@s. Pero siempre es recomendable mantener hábitos que te pueden ayudar a hacer más llevadero el proceso. Recuerda:

  • Estar presente, consciente de lo que vives
  • Observar y oír tu organismo, tratarte amablemente :)
  • Descansar, desconectarte en lo posible de las pantallas
  • Mantenerte hidratad@
  • Mover tu cuerpo cuando ya te sientas mejor (el sedentarismo no contribuye a tu proceso sanador)
  • Llevar una alimentación antiinflamatoria, alta en vegetales frescos y completa en nutrientes esenciales
  • Evitar tóxicos de todo tipo: cigarrillo, alcohol, otras drogas, aditivos alimentarios, automedicación de fármacos...
  • Dedicar la poca energía que te queda al estar recuperándote a aquellas cosas que te traigan paz y alegría. Evita ver noticias (tragedias) o prestar atención a comentarios negativos, agresivos, etc.

Si bien esta pauta de alimentación la recomiendo durante un proceso covid, el llevar un estilo de alimentación integral alto en vegetales naturales y diversos, puede ayudarte a prevenir infecciones más severas y distintos trastornos en tu salud, asociados a prácticas de estilo de vida. El autocuidado es una herramienta preventiva. No hay que esperar hasta enfermarnos para tomar acción y hacer cambios. Hoy mismo puedes comenzar.


Mantener una nutrición óptima y una correcta ingesta alimenticia impactan en tu sistema inmune a través de la expresión de genes, la activación celular y la modificación molecular.
Además, varios elementos de la dieta son determinantes en la composición de la microbiota intestinal y así, en diseñar las respuestas inmunes del cuerpo.

Te comparto algunos consejos alimenticios y de estilo de vida, para fortalecer tu sistema inmune y promover la desinflamación interna:

1- Reduce o elimina componentes inflamatorios asociados con el debilitamiento de tu inmunidad:

-El alcohol
-
Productos ultraprocesados:
-Carnes
-Lácteos
-Grasas hidrogenadas
-Frituras
-Comidas excesivamente altas en carbohidratos
-Harinas blancas
-Endulzantes y edulcorantes

2. Tu estado nutricional es clave para mantener un sistema inmunitario fuerte y en orden. Por esto, incorpora:

-Agua purificada, libre de metales pesados. Al menos 8 vasos al día.
-Zinc, selenio, cobre y hierro: Presentes en legumbres, frutos secos, semillas. Para mejorar la absorción del hierro de las legumbres, asegúrate de acompañarlas con jugo de limón u otra fuente de vitamina C.
-Proteína: legumbres, frutos secos, semillas, tofu, tempeh
-Omega 3: 2 cdas. de chía o linaza, 5 nueces y/o suplemento vegano.
-Otras grasas saludables y Vitamina E: grasas insaturadas y de preferencia crudas: palta, aceitunas, semillas y frutos secos, aceite de oliva extra virgen.
-Vitamina B12: suplemento
-Vitamina D: suplemento / Luz del sol
-Polifenoles, carotenoides, vitamina C: Frutas y verduras de todos los colores (5 a 10 porciones al día)
-Alimentos fermentados: chucrut, yogur vegano, picles caseros. Nutrirán tu mucrobiota, base de tu inmunidad.

Practica como parte de un estilo de vida saludable:

-Ayuno intermitente : extiende la ventana de tiempo en la que no consumes alimento (sí bebes agua). Puedes cenar un poco más temprano y desayunar un poco más tarde. Este hábito promueve la limpieza de tu intestino, la desinflamación de tu cuerpo y la estabilidad de tus niveles de insulina.
-Hábitos de buen dormir: Dormir profundamente, las horas que te permitan amanecer descansado, es una de las variables de mayor impacto en el desarrollo de tu salud.
-Respiración consciente: Buscar respiración completa cada vez que notes tu respiración cortada.
-Actividad física diariamente: Moverte ayuda a tu sistema cardiovascular, a tu sistema linfático que retira toxinas de tu cuerpo y transporta tus defensas, acelera tu sangre, oxigenando mejor tus células, y tanto más.
-Manejo del estrés: priorizar tareas/ reconocer y limitar fuentes de estrés en tu vida
-Control de exposición a pantallas y mundo virtual: más vida real y menos vida virtual te ayuda a cuidar tu energía y promover tu bienestar físico, emocional y mental.
-Nutrir relaciones sociales saludables, que te aporten sensaciones positivas y equilibrio emocional.

Gracias al autocuidado que mantengo hace muchos años pude estar tranquila durante mis días con Covid. El valor que tiene llevar un estilo de vida sano es inmenso. Si bien la salud es el resultado de muchísimas variables, muchas de ellas dependen de nosotr@s y de nuestras elecciones. Enfócate en esas.

Tu estilo de vida tiene un impacto gigante en tu nivel de bienestar, energía y alegría.


Te deseo mucha salud y vitalidad para cada día de tu vida!


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